Terapias para niños y adolescentes

Cómo te ayudaremos:

El rasgo distintivo de estas terapias radica en que se centran en el presente y ofrecen herramientas concretas que el paciente puede aplicar en su vida diaria para ver cambios en su estado emocional.

En el caso de las terapias para niños o adolescentes, éstas van acompañadas de sesiones para los padres de asesoramiento psicológico en crianza y manejo de las dificultades del niño.

En nuestro enfoque psicoterapéutico formamos a los padres como coterapeutas para aplicar en casa las estrategias que el niño aprende en terapia, y así, aumentar la efectividad del tratamiento y prevenir retrocesos en el proceso de mejoría del niño.

Nuestras terapias para niños y adolescentes pueden realizarse mediante dos modalidades: presenciales o por videoconferencia.

Atendemos diversas necesidades emocionales y diagnósticos:

• Ansiedad, temores, fobias, dificultades con el sueño y control de esfínteres, mutismo selectivo.
• Depresión infantil y desmotivación.
• Baja tolerancia a la frustración, dificultades en el manejo de la ira, trastorno de conducta, agresividad, trastorno negativista desafiante.
• Problemas de autoestima y valía personal.
• Dificultades en el proceso de separación de los padres, duelo por pérdidas familiares,
• Conducta inadecuada en el ambiente familiar, oposición a las reglas, relación afectada con los padres.
• Trastornos alimenticios: anorexia, bulimia y otros
• Dificultades en la socialización
• Conductas de riesgo en la adolescencia: consumo de alcohol, drogas, sexualidad precoz, autolesiones, transgresión de reglas.
• Trastornos del desarrollo: autismo y síndrome de asperger
• Dificultades y retraso cognitivo
• Bajo rendimiento académico, problemas de aprendizaje.
• TDAH, dificultades en atención y funciones ejecutivas
• Orientación vocacional
• Intervención en TDAH y problemas de aprendizaje
• Problemas de lenguaje, retraso del habla.
• Orientación a padres para la estimulación y vínculo con sus hijos en la primera infancia.

Frecuencia

Las terapias pueden darse de 1 a 2 veces por semana, dependiendo de las necesidades del paciente, durante la primera fase del tratamiento.

Los siguientes pasos

Luego de un periodo de trabajo, y de ver su mejoría, se pasa a la frecuencia quincenal.

Finalmente, ocurre el proceso de mantenimiento y prevención de recaídas, cuya frecuencia es mensual u ocasional.

 

Contáctanos

Si tienes dudas sobre nuestras terapias para niños y adolescentes, o quieres agendar una cita, puedes enviarnos un mensaje. Estamos atentos para contestarte.